Al correr los primeros veinte años de vida
republicana, Bolivia no tuvo el orgullo de cantar sus loas patrias, fuera de
aisladas canciones que poco traducían el sentimiento patrio y el espíritu
nacional; pues el Himno escrito por Pedro Jiménez de Abril Tirado, no llegó a
oficializarse. En este mismo lapso, tampoco se contó con orquesta ni teatro
estable.
Llega el año 1841; el 18 de noviembre tuvo
lugar la batalla de Ingavi en la cual el Gral. José Ballivián venció al ejército
peruano. A partir del año siguiente esta alta gloria boliviana se festejaba con
ceremonias oficiales y populares.
Próximo al cuarto aniversario de la
victoria de Ingavi y la Emancipación patria, el Gral. Ballivián hizo construir
un pequeño escenario, que tuvo carácter de Teatro, cuyo estreno se anunció para
mediados de noviembre de 1845. Fue a esta altura y con el anhelo de satisfacer
al pueblo de su gobierno, que el Gral. Ballivián invitó y contrató al ilustre
músico don Leopoldo Benedetto Vincenti; que se encontraba en Chile, para que se
hiciera cargo de la reorganización de las bandas militares bolivianas.
Impuesto Vicenti de la tarea que el gobierno
de Bolivia le había confiado, surgió al Vencedor de Ingavi, la necesidad de
escribir una música marcial, con versos que loasen las acciones libertadoras y
guerreras y mantuviesen vivo el sentimiento épico de los hijos de nuestra
patria. Los versos estarían a cargo del poeta Dr. José Ignacio de Sanjinés, que
se encontraba en La Paz.
Inaugurado el Teatro (actualmente Teatro
Municipal Alberto Saavedra Pérez) y surgida la idea de dar al país una canción
que sea el símbolo de su libertad, el 18 de noviembre de 1845 se levanta por
primera vez el telón del escenario de la ciudad de La paz, que fuera proyectado
y construido por el arquitecto Núñez del Prado. Esta fecha marca caracteres
históricos con doble acontecimiento: se estrena el Himno con el nombre de
Canción Patriótica Nacional, celebrando el cuarto aniversario de la Victoria de
Ingavi, y se da inicio a una actividad lírica de la que será centro este mismo
escenario.
La alborada de dicho día fue saludada al
hacerse escuchar sus vibrantes notas del marcial Himno destinando a glorificar
la hazaña de Ingavi que, como ensayo, ejecutaron las bandas militares de los
Batallones V, VI y VIII de La Paz, siendo este resultado, el Nuevo Teatro, en
aquella noche, abrió sus puertas por primera vez para escuchar el estreno
oficial del Himno Patrio. Cuanto de granado contaba La Paz, el Presidente y sus
Ministros, los Legisladores y los altos Oficiales del Ejército, señoras y
jóvenes, se dieron cita en el Teatro. Antes de la “Premier” del Himno Nacional,
se ejecutó la obertura de la ópera Fra Diabolo, de Auber, continuando el
programa con una serie de números de óperas distintas. He aquí la exposición:
PROGRAMA
De la Gran Misa de Gloria que tendrá
lugar en la Catedral el día 18. Música de Benedetto Vincenti.
EJECUTADA
CANTORES
SOPRANOS:
5 monacillos de la Catedral que
cantan por primera vez con acompañamiento.
TENORES:
Molina, Morales y Nates de la
Catedral.
BAJOS:
Sr. Braundon, Vincenti, Gallegos y
Blanco.
En un intermedio tocará la orquesta
un potmermoor, ópera de Donizetti.
ORQUESTA:
Director – Benedetto Vincenti.
VIOLINES:
Donaire.
PRIMEROS:
Cáceres – Músico de la Catedral
Ledesma.
SEGUNDOS:
Tapia – Catedral.
VIOLAS:
Antequera
N.N. – Catedral
VIOLONCELLOS:
Palacios.
CONTRABAJO:
Fernández.
FLAUTAS:
Francisco Alcoreza – Catedral
Hidalgo – Militar.
OBOES:
Tarifa – Catedral.
M. Alcoreza – Catedral
FAGOTES:
Sambrano – Militar.
Mancilla – Militar.
PISTONES:
Solis – Militar
TROMPAS:
Espinosa – Catedral
PRIMERO:
Alva – Militar
Bac – Militar
SEGUNDOS:
Osuna – Militar
CLARINES:
Cornelio – Militar
Rosel – Militar
TROMBONES::
Vergara – Militar
Gorostizo – Militar
POTUGLEIDES
Cabezas – Militar
Laredo – Militar
Tímpano o redoblante – Camino
PROGRAMA
Música de la función de Teatro que
tendrá lugar el día 18
PRIMER ACTO:
Obertura Fra Diabolo
Opera Cómica de Auber
CANCIÓN PATRIÓTICA:
Cantada por doce aficionados
Letra del Sr. Dr. Sanjinés y Música
del Sr. Vincenti.
SEGUNDO ACTO:
Fantasía – de la ópera
Lucía de Lamermmor de Donizetti
TERCER ACTO:
Obertura de Lutuer de Vienne
(fabricante de instrumentos de Viena)
Opera de Hipólito Monpuo
CUARTO ACTO:
Las Extranjeras – Cuadrillas con
variaciones de Herzt.
QUINTO ACTO:
Gran Galopa – de Tolbeque
En los intermedios se cantará: Arias – o
Solpo Impensato de la Gazza Ladra de Rossini cantado por el Sr. G. Braudon.
Dúo – sul campo della Gloria – Belisario
de Donizetti – por los SS. Vincenti y Molina.
Por el programa expuesto en la nómina de
cantores, la canción patriótica fue cantada por primera vez por doce personas preparadas
especialmente por su autor y dirigidos en una versión armónica a tres voces a
coro en la primera parte, dos voces solistas en la segunda, y cuatro a coro en
la tercera y última parte, en la tonalidad de Mi Bemol Mayor y en movimiento
Allegro Marciale, acompañado por orquesta.
La orquesta que actuó en la noche del
estreno oficial del Himno Nacional, probablemente fue la misma que ejecutó la
Misa de Gloria de Vincenti, aquella mañana del 18 de noviembre de 1845, en la
Catedral, se puede inferir que una gran parte de los músicos eran empleados de
la Iglesia Episcopal que tocaban bajo la dirección de Donayre. Los otros,
reforzantes, pertenecían al ejército.
Según la lista orquestal, debió sonar muy
pobre por la escasa cantidad de los grupos de cuerda y arco, especialmente en
los “tuttis”, en comparación con el sector de los instrumentos de viento que
incluye las familias completas de madera y metal, más los de percusión. Pero ellos
nos muestran el temperamento del autor al ofrecer, en esos tiempos, una
monumentalidad orquestal. Dicha orquestación no llegó hasta nosotros. A la
fecha la primera orquestación que se hizo en el país posterior al estreno del
Himno en 1845, fue realizada por el Dr. Erich Eisner que dirigió la Orquesta
Sinfónica Nacional desde 1944 hasta su muerte el año 1956.
Esta misma orquestación la estuvo
ejecutando con nuestra Sinfónica, António Montes Calderón al asumir la
dirección de la Orquesta tras la muerte de Eisner. Desde el 18 de noviembre de
1845, nuestra Canción quedó como símbolo de Libertad en el fervor
cívico-patriótico del país. Confundida entre una colección de textos, y debidamente
escogida, se encuentra la partitura original del Himno nacional de Bolivia. Una
caja con fondo de terciopelo rojo guarda esa reliquia de cuatro hojas de
cartulina de 40 cm. De largo por 30 de ancho, cada una; un cintillo tricolor
envuelve las ocho carillas. En la tapa, se encuentra la siguiente leyenda: “A
la noble heroica Nación Boliviana Himno Patrio Nacional compuesto por L.
Benedetto Vincenti”.
Las letras presentan cuidadosa labor manuscrita.
En la tercera cartilla, hay una dedicatoria que dice: “dedicado a mi amadísimo
hijo Isaac (fdo) L. Benedetto Vincenti”. Este ejemplar no fija ni señala fecha
y lugar.
Entre las estrofas del Himno, existe una
que llegamos a conocerla bastante alterada en el primero y ultimo verso, como
se verá:
Si ambicioso un Poder algún
día
Sojuzgar a Bolivia
intentare
Al destino fatal se
prepare
Que otro injusto en
Ingavi sufrió.
La escritura es rica, en efectos. Tales efectos
consisten en dobles y triples terceras, martillantes ritmos en el acompañamiento,
y una distribución vocal al estilo operístico. La amplitud de la parte pianística,
por otro lado, hace suponer que se trata más bien de una reducción de la partitura
orquestal primitiva; en otros términos, se trata de una partitura condensada.
La primera impresión litográfica del Himno
se hizo durante el gobierno de Gregorio Pacheco (1884 - 1888) pero sufriendo ciertas
modificaciones en la música y textos que había sido adoptados oficialmente el 18
de noviembre de 1845, bajo reconocimiento de varias Resoluciones Supremas y
Ministeriales, modificaciones que suscitaron protesta de músicos consagrados de
entonces, arguyendo que la armonía original del autógrafo era mejor. Esto
motivó la Resolución Suprema del gobierno de Severo Fernández Alonso (1896-99)
mediante la cual se mantenía la autenticidad y carácter del autógrafo, disposición
que fue reforzada por el gobierno constitucional del Dr. Eliodoro Villazón (1909-13).
La señora doña Antonia Maluschka, en 1909,
realizó la edición de tres tomos de canciones Escolares para Bolivia donde se incluyó
el Himno con el nombre de Canción Nacional, transportada a la tonalidad de Do
Mayor, tal como se ejecuta al presente ya que su estructura musical era (y es) difícil
para ser entonada por el pueblo y coro escolar.
Actualmente se llama Himno Nacional y su
movimiento ha quedado en Marcial.
DR. JOSÉ IGNACIO DE SANJINÉS
El lugar de nacimiento de este
Jurisconsulto, Legislador y Poeta Boliviano, está en disputa entre La Paz,
Sucre y Potosí. Nació en el año 1786; falleció el 15 de agosto de 1864.
Desempeñó varios y elevados cargos sobresaliendo
en todos los que se le confiaron. Así, en el profesorado, consagró todos sus
afanes al servicio de la juventud a la que educaba con el ejemplo vivo de sus
cualidades mortales; como Diputado al Primer Congreso Constituyente, firmó el
acta de la Independencia y la primera Constitución Política de Bolivia; y como
hombre de letras, es una de las figuras que tiene extraordinaria importancia.
LEOPOLDO BENEDETTO VINCENTI
El nombre de este músico, aunque de
nacionalidad italiana, merece figurar entre los de los artistas bolivianos por ser
el creador de nuestra Canción Patria.
Nació en Roma y cursó estudios musicales en
el Conservatorio de París. En esta ciudad fue contratado por el Contralmirante
Du Thouss para que le acompañara en su segundo viaje alrededor del mundo.
Al pasar por Chile, Vincenti fue contratado
por el gobierno chileno como director de la banda de música del ejército de
aquel país, donde desplegó una actividad musical considerable, convirtiéndose en
el propulsor de la música lírica en La Paz, como lo atestiguan los diferentes programas
aparecidos en la prensa local de aquellos años.
Cuando Vincenti llegó a Bolivia, el diario
La Época, en un elogioso artículo publicado el 15 de septiembre de 1845, refiriéndose
a su personalidad, expresó: “Joven aventajado por su educación y sus principios
liberales… más que todo, por su profunda capacidad en el hermoso arte de las
armonías. Su permanecía aquí contribuirá eficazmente a desterrar el fastidio de
nuestra vida retirada; él educará a nuestros aficionados; y nuestra música
militar, lo mismo que las de salón tocarán en un punto a que aún no han llegado”.
En edad avanzada retornó a la ciudad de su
nacimiento, donde falleció el año 1920.
Becerra, R. (2003). Introducción a la Cultura
Musical. Cooperativa Rural de Electrificación CRE. Santa Cruz: Bolivia. Pág 158
– 164.
Canción Nacional, compuesta por Pedro Ximénez
Abrill Tirado. Partitura de la Colección Pedro Ximénez Abrill Tirado del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, BO ABNB, Música PXAT 1487.
Canción Nacional, publicado por Antonia
Maluschka en su libro canciones para las escuelas de Bolivia, Tomo I
Himno Nacional de la República de Bolivia,
edición oficial publicada el año 1943 por el Ministerio de Educación.












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